La malla de poliéster es la más utilizada en la actualidad debido a su resistencia a la mayoría de sustancias químicas empleadas en serigrafía ya que se mantiene dimensionalmente estable frente a los cambios de humedad. Sin embargo, el inconveniente de una malla de poliéster es que las fibras no tratadas tienen una superficie muy lisa casi como el cristal. Si además hay presencia de residuos de tinta con base aceitosa en esta superficie, comprobará que es muy difícil lograr que cualquier tipo de emulsión se adhiera a ella. El tratamiento previo de la malla es la clave para ayudar a que la emulsión se adhiera mejor a esta superficie.
Para ello podemos ofrecerte 2 cepillos especialmente pensados para el trabajo diario de la serigrafía.
1 Cepillo de poliéster para el desengrasado y preparado de la pantalla
1 Cepillo para el recuperado de la emulsión y posterior aplicación del quita imagen fantasma
Por su composición, ninguno de los cepillo daña el tejido y elimina los restos de emulsión fácilmente
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